Kralendijk, Bonaire – Durante sus deliberaciones con el Consejo Ejecutivo de Bonaire y el Consejo Insular, la Junta de Supervisión Financiera de Bonaire, St. Eustatius y Saba (Cft) llamó la atención sobre los problemas que forman parte frecuente y reiteradamente de las conclusiones de la Cft. La recaída de la gestión
financiera, la política presupuestaria y el funcionamiento de las entidades gubernamentales es inminente, debido a la falta de capacidad ejecutiva. Bonaire simplemente no tiene el control.
Capacidad ejecutiva
En todas las áreas, la Cft observa una falta de capacidad ejecutiva, que varía desde la falta de toma de decisiones por parte de la administración de la isla hasta la implementación de las mismas. Esto se refleja en una recaída de la gestión financiera, una implementación deficiente de la política, así como en el funcionamiento insuficiente de las entidades gubernamentales.
Gestión financiera
En los últimos años, Bonaire ha tomado medidas importantes para mejorar su gestión financiera. En cuanto al año 2023, por segunda vez consecutiva, Bonaire recibió un dictamen de auditoría sin reservas sobre sus cuentas anuales.
Sin embargo, hay una recaída. El año pasado, el CFT expresó críticas en sus dictámenes y consideró necesario abstenerse de emitir una evaluación del cuarto informe de ejecución para 2024, debido a la insuficiencia de la información proporcionada. Esto hace que el Consejo Insular se vea limitado en su función de supervisión. A la luz de estas constataciones, el Consejo Ejecutivo invitó al CFT a emitir recomendaciones más detalladas a corto plazo sobre la estructuración de la gestión financiera.
Ejecución del presupuesto 2024 y consecuencias para 2025
El CFT reiteró sus preocupaciones sobre la viabilidad de las ambiciones presupuestarias de Bonaire y observa una evolución preocupante de los recursos no gastados. En cinco años, el presupuesto de Bonaire se ha duplicado, al igual que sus reservas. La isla tiene dificultades para gastar recursos y coloca una gran cantidad de recursos en reservas especiales, posponiendo las ambiciones políticas para 2024 a años posteriores.
Entidades gubernamentales
El Cft también llamó la atención sobre la gobernanza corporativa y la gestión de las entidades gubernamentales. El funcionamiento de Selibon es un indicador de la urgencia de abordar estas cuestiones lo antes posible.
Recaudación de impuestos locales Por último, el Cft reiteró sus objeciones a la intención de Bonaire de asumir la recaudación de impuestos locales de Belastingdienst Caribisch Nederland. Esto conlleva riesgos considerables para el presupuesto de Bonaire.
La organización administrativa ya está bajo presión debido a los desafíos en las áreas de implementación de políticas, gestión financiera y entidades gubernamentales. En respuesta, el Consejo Ejecutivo declaró que en cualquier caso dejará las tareas de contraataque de las autoridades fiscales en manos de Belastingdienst Caribisch Nederland. Además, Bonaire priorizará el restablecimiento del orden en la administración tributaria básica.