PHILIPSBURG, Sint Maarten – La Cámara de Comercio e Industria (COCI) está profundamente preocupada por el reciente aumento de robos que afectan a las empresas de toda la isla. Si bien COCI reconoce y aprecia los esfuerzos continuos de las fuerzas del orden para frenar el crimen, es evidente que se necesita hacer más para proteger a la comunidad empresarial y, por extensión, a toda la nación. El aumento actual de la actividad delictiva amenaza no solo a las empresas locales sino también a la estabilidad económica y la reputación del país como un destino turístico de primer nivel.
COCI reconoce las graves implicaciones de este aumento de la delincuencia, que afecta desproporcionadamente a la comunidad empresarial al crear una atmósfera de incertidumbre e inseguridad. Tanto las pequeñas como las grandes empresas han sufrido pérdidas, y este entorno amenaza con erosionar la confianza de los inversores. Además, el impacto adverso en la reputación de nuestra nación como un destino seguro y acogedor podría disuadir a los visitantes potenciales, poniendo en peligro el sector turístico, el pilar principal de nuestra economía.
Mientras nos preparamos para la próxima temporada alta, cuando los ojos del mundo se dirigen a nuestra isla en busca de relajación y aventura, garantizar la seguridad debe ser la máxima prioridad. Por lo tanto, COCI hace un llamado claro para que tanto las autoridades como los dueños de negocios estén más atentos. La Cámara insta a las agencias de aplicación de la ley a intensificar sus medidas de prevención del delito, aumentar las patrullas en las zonas comerciales y fortalecer las iniciativas para disuadir la actividad delictiva, en particular durante este momento crítico para nuestra economía.
“Reconocemos plenamente los esfuerzos que ya han hecho las autoridades para combatir el delito, pero el aumento de los incidentes de robos demuestra que se necesitan medidas adicionales con urgencia”, dijo la Sra. Peggy Ann Branon, Presidenta de COCI. “Estos incidentes no solo amenazan a las empresas, sino que también tienen consecuencias más amplias para la estabilidad de nuestro país y las perspectivas turísticas. Es imperativo que trabajemos colectivamente para restablecer una sensación de seguridad que proteja a las empresas y tranquilice tanto a los residentes como a los visitantes”.
Además, COCI hace un llamado a los dueños de negocios para que sigan siendo proactivos en la protección de sus instalaciones, clientes y empleados. Se anima a los operadores comerciales a mejorar sus medidas de seguridad, incluyendo la inversión en tecnología de vigilancia, la adopción de las mejores prácticas para la prevención de pérdidas y la colaboración estrecha con las fuerzas del orden local. Crear un entorno seguro para las empresas es una responsabilidad compartida que requiere la participación activa de todos los sectores de la sociedad.
COCI también hace un llamado a los miembros de la comunidad para que apoyen los esfuerzos de prevención del delito manteniéndose alertas y denunciando las actividades sospechosas a las autoridades. Combatir el delito de forma eficaz exige un frente unido, y sólo mediante la colaboración entre empresas, autoridades y ciudadanos podemos salvaguardar la prosperidad de nuestra isla.
Tras la consulta celebrada con la comunidad empresarial en la que se debatió la situación delictiva, COCI, en colaboración con el Ministro de TEATT y VROMI, tratará de mejorar todas las áreas comerciales basándose en el aporte vital de la comunidad empresarial mediante la formulación de propuestas para añadir luces, y con el Ministro de Justicia y la vigilancia de las fuerzas del orden en estas áreas.
La Cámara está preparada para trabajar en estrecha colaboración con las autoridades, los responsables políticos y otras partes interesadas para encontrar soluciones eficaces y sostenibles para combatir esta ola de delincuencia. COCI cree que mediante una fuerte colaboración, podemos implementar estrategias integrales que garanticen un entorno más seguro para las empresas, los residentes y los turistas por igual.