PHILIPSBURG, Sint Maarten – En respuesta al pedido de la Parlamentaria Roseburg de una mayor transparencia y rendición de cuentas en relación con la gestión del Fondo contra el Crimen de St. Maarten, el Parlamentario Omar E.C. Ottley ha expresado su firme apoyo a la iniciativa de Roseburg de asignar el fondo a iniciativas de proyectos comunitarios. Ottley señaló una preocupación general de que el Fondo contra el Crimen parece utilizarse únicamente para destruir a los habitantes locales en detrimento de las comunidades locales, mientras que su verdadero potencial sigue sin explotarse.
Citando el éxito de la estrategia de prevención del crimen de Curaçao, donde casi 30 millones de florines de las Antillas Holandesas se han canalizado a 18 proyectos distintos centrados en la educación, los deportes y la participación comunitaria, Ottley cuestionó por qué St. Maarten aún no había implementado estrategias similares. Destacó que las iniciativas de Curaçao muestran lo que podemos lograr cuando los fondos contra el crimen se utilizan para la prevención y el desarrollo en lugar de medidas punitivas.
“Curaçao nos está demostrando que la prevención del delito va más allá de los arrestos y las condenas. Se trata de construir comunidades antes de que se cometan los delitos”, afirmó Ottley.
“Aquí en San Martín, tenemos millones y, sin embargo, nuestro Fondo contra el Delito ha hecho poco más que destruir a nuestros habitantes en lugar de fortalecerlos”.
“Ha habido demasiados casos en los que el Fondo contra el Delito parece haberse utilizado principalmente para destruir a nuestros habitantes. Por eso, los habitantes de San Martín sienten que el fondo ha estado demasiado a menudo vinculado a resultados destructivos para los residentes de la isla”, dijo el Parlamentario Ottley.
Expresó su preocupación por el hecho de que hay varios casos en los que se confiscan bienes y se destinan al Fondo contra el Delito, pero cuando la fiscalía pierde los casos, el gobierno tiene que pagar la factura mientras que el dinero del fondo permanece intacto. “Esto no es justicia y, desde luego, no es así como debemos utilizar estos recursos”.
Reiteró la necesidad de que el fondo apoye programas educativos, iniciativas deportivas, creación de empleo y esfuerzos de rehabilitación para reducir el delito y ofrecer oportunidades significativas para los jóvenes.
Entre las recomendaciones realizadas por el Parlamentario Ottley se encuentra la de establecer y financiar centros comunitarios que ofrezcan actividades extraescolares, deportes, artes y programas educativos para mantener a los jóvenes involucrados en actividades positivas. También recomendó asignar fondos para establecer y apoyar iniciativas de vigilancia vecinal y financiar programas de rehabilitación que ayuden a los ex delincuentes a reintegrarse en la sociedad. “Esto podría incluir servicios de colocación laboral, asesoramiento y asistencia para la vivienda, que ayudan a prevenir la reincidencia al ofrecer a los ex reclusos una segunda oportunidad”.
“Necesitamos empezar a ver inversiones reales en nuestra gente antes de que se conviertan en estadísticas”, dijo Ottley. “El Fondo contra el Delito no debería utilizarse únicamente para pagar facturas o incautar activos. Debería utilizarse para mejorar nuestro país y dar a nuestras comunidades los recursos que necesitan para prosperar”, afirmó el Parlamentario Ottley.